Resección Transuretral de Próstata o Cirugía de Próstata

¿Qué es la cirugía de próstata?

La resección transuretral de la próstata (conocido como RTUP) es
una cirugía que consiste en remover la parte interna de la
próstata. Su función es tratar el agrandamiento de la próstata,
conocida como hiperplasia prostática benigna (HPB).
En
Médica Sur se practican dos tipos de tratamiento: cirugía por el
canal uretral en la que se extrae la próstata por fragmentos (RTUP
propiamente) y la terapia de láser Green Light que vaporiza el
exceso de tejido de la próstata.

Preoperatorio

Antes de decidir el procedimiento y programar la intervención, es
necesario un examen médico por parte del urólogo y la realización
de los estudios de imagen y preoperatorios de rutina.

Procedimiento

Para la cirugía por el canal uretral (RTUP) se extrae, por
fragmentos, el tejido prostático que está impidiendo la salida
correcta de la orina. Es de bajo riesgo (mínima invasión). El
tiempo en el quirófano es de aproximadamente una hora y requiere
de 48 a 72 horas de hospitalización, dependiendo de la
recuperación del paciente.
El procedimiento por láser Green
Light tiene una recuperación más rápida, con menor sangrado y los
resultados son iguales a los de la cirugía. El láser permite
calentar y vaporizar el exceso de tejido de la próstata para
ensanchar el canal para que pase la orina. Este método es
recomendado para pacientes con problemas de coagulación.

Después de la operación por el canal uretral y la estancia de
recuperación, el paciente es llevado a su cuarto con una sonda
urinaria que lava la vejiga y la próstata introduciendo agua por
un orificio y eliminando orina y sangre por otro. Antes de su
alta, se retira la sonda y se comprueba que el paciente pueda
orinar.
La ventaja de la resección transuretral de próstata
es que el tejido retirado puede ser analizado en patología para
descartar cáncer.
Por otro lado, el procedimiento con láser
Green Light tiene una recuperación más rápida y un menor sangrado.
Aunque cada experiencia es diferente, los pacientes pueden ser
dados de alta unas horas después de la cirugía. Si es el caso de
que sea necesario introducir un catéter, éste podrá ser removido
en las siguientes 24 horas.
Es recomendable que la primera
consulta postoperatoria sea en se realice en la primera o segunda
semana para verificar que no haya complicaciones y revisar el
análisis histopatológico. Esta cita puede hacerse de manera
presencial o por medios remotos.
También se recomienda un
seguimiento con el urólogo y atender sus recomendaciones, entre
las que se indicará evitar esfuerzos físicos durante las primeras
semanas.